De diseñar para su propia marca SaV Ceramics a hacerlo para otros. Sabrina Vasulka y Nahuel Hernando eligieron sumar un nuevo rol a su tarea diaria: la de proyectar y producir objetos cerámicos para terceros.
Desde 2016, SaV Ceramics es la marca con la que Sabrina Vasulka y Nahuel Hernando diseñan, desarrollan y producen -ellos mismos- sus líneas de objetos cerámicos que combinan técnicas tradicionales con nuevas tecnologías. La primera que conocimos fue Mandala, una colección de porcelana coloreada, horneada en oxidación a alta temperatura, compuesta de taza, plato, mini plato y el cono, un adorno navideño. Luego llegó Andes -inspirada en el cordón montañoso-, con sus tazas, mate y florero. Todas piezas de uso cotidiano con texturas tridimensionales muy táctiles, que invitan a ser exploradas.
Una visita a su taller-estudio-laboratorio en Paternal, nos sirvió para ahondar más en su proceso de trabajo, y actualizarnos con los nuevos proyectos del dúo de diseñadores que se perfeccionaron en el manejo de la cerámica gracias a una maestría en Diseño Cerámico en la Staffordshire University en Stoke on Trent, la capital inglesa de la cerámica.
DISEÑAR PARA OTROS
En un barrio de pequeñas fábricas, talleres y depósitos, SaV comparte casa con otros emprendimientos instalados en el mismo PH: un entorno inspirador para mentes creativas. La novedad es que, además de producir para SaV, el taller ahora diseña y realiza productos para otros.
¿Cómo es esto? Nahuel lo explica: “Empezamos a dar servicios de diseño, desarrollo y producción para terceros: principalmente para cafeterías, macetas de especialidad, y otros clientes. Nos gusta mucho este nuevo rol. Hacemos todo el proceso, que parte de charlar con el cliente, ver qué quiere contar y mostrar. Se propone un diseño, se desarrolla, se hacen la moldería, las piezas, y se entregan”.
Rita, la cafetería de especialidad de Núñez, fue la primera en encargarles un sistema de vajilla: tazas y platos en tres medidas y un cuenco en crudo, gris y rosa, una paleta de colores propuesta en base a la identidad gráfica de este local que ofrece pastelería y brunch.
La inspiración es la planta Santa Rita. “Nos pidieron que la vajilla fuera muy elegante y delicada, fácil de apilar, y que tuviera que ver con la naturaleza urbana. Y fuimos por ahí”, explica Sabrina. La vajilla ideada por SaV para Rita acaba de ser distinguida con el Sello de Buen Diseño argentino.
Otro ejemplo es la vajilla para Demente (DMNT), inspirada en el proceso de amasado que da origen a las riquísima pastelería que prepara Vicky, la dueña de esta panadería también ubicada en Núñez. Los roles de canela, los croissants y las capas de hojaldre se traducen en las formas de tazas y platos.
+¿Cómo responden los productos al alto uso?
Las piezas que entregamos -tanto en Rita como en Demente- funcionan muy bien, y nos siguen pidiendo. Para desarrollarlas, tuvimos que hacer nuestra propia investigación, y tener la experiencia del consumidor de café. Fuimos conociendo que el asa no es obligatoria, porque en el café de especialidad, la temperatura es un poco más baja; entonces la cerámica no llega a calentarse. Determinadas formas de tazas le complican al barista el hacer el dibujo con la leche. Hay un montón de cositas que no sabíamos, y que fuimos aprendiendo a partir de investigar y de las charlas con los clientes.
+Entonces, ¿fueron abandonando el mate?
No, ¡somos re-materos! Aunque no somos muy cafeteros, de repente nos vimos consumiendo café de especialidad. Un poco para tener la experiencia, pero nos empezó a gustar y ahora, si tenemos un ratito, nos tomamos un cafecito con algo dulce. Porque no es lo mismo el café en casa que el que tomás en una cafetería…
+Las tazas tienen dos texturas…
Todo lo que tenga contacto con el café o con los labios va esmaltado. Si bien el gres tiene muy poca absorción, son un tema las manchas del café y también la sensación con los labios: hay gente que no puede tocar con los labios la textura de la cerámica porque le da escalofríos. Además, esmaltadas, las piezas son más fáciles de limpiar.
+A partir de estas experiencias, ¿surgieron otros pedidos de vajilla exclusiva?
Desde la primera entrega a Rita hace un año atrás, ya cotizamos más de 15 cafeterías que quieren invertir en diseño. Hay un boom muy fuerte. Diseñamos vajilla exclusiva para otras dos cafeterías más, pero como todavía no están entregadas y presentadas, no podemos mostrarlas aún… Como las piezas llevan nuestro sello en la base, muchos nos contactan para comprarnos la vajilla de Rita, por ejemplo, pero no la vendemos, es exclusiva de ellos, aunque sí se puede comprar en la cafetería.
HACIA UN NEGOCIO SUSTENTABLE
Como explicaban Sabrina y Nahuel, uno de los objetivos de este año fue mostrarse más como un estudio de diseño que como un taller que produce. Esta meta es resultado de lo aprendido en un seminario de diseño y negocios que hicieron en el CMD, y de la asesoría en negocios que reciben de Víctor Jablonka, que los está ayudando a organizarse en cuanto a tareas y tiempos, y a pensar un modelo de negocio sustentable que les permita seguir creciendo.
Es así que Nahuel se dedica al desarrollo y producción, mientras que Sabrina está abocada al diseño y las cotizaciones. Y aunque para un emprendedor, derivar tareas es lo más difícil, lograron hacerlo con las redes sociales, y desde hace unos meses tienen un asistente en el taller. Tener actividades personales después del horario laboral también los ayudó, y les permitió ganar los fines de semana, que ahora son sagrados.
+Dentro de esta nueva línea de trabajo están las macetas y regaderas para Planta.
Sí, Planta es un vivero boutique. Para ellos diseñamos una regadera para suculentas y una maceta con platito. En la búsqueda de un concepto guía, la regadera Lab se inspira en los instrumentos de un laboratorio, por eso tiene las rayitas que remiten a los medidores. Las macetas se llaman Brote porque son como las plantas, que van creciendo una dentro de la otra: la que sale abraza a la otra, y así. Y las querían manchadas para hacerlas piezas únicas, por eso hay una tanda lisa y otra con manchas. La pintura se funde en el mismo material, y queda un efecto pincelado o chorreado, con franjas de colores.
+¿Han diseñado para otros viveros?
Sí, macetas en tres tamaños para Frida. Aunque todavía no hay ninguna terminada, tenemos la moldería hecha, y son para un vivero boutique que está en Florida, Estados Unidos. Viene maceta con plato, y está inspirada en la artista Frida Khalo. Fue un proyecto que surgió gracias al boca en boca.
DOMINAR LA TÉCNICA
Se escucha un leve zumbido: es el horno que trabaja a más de +1000ºC. Toda la magia sale de ahí, accidentes incluidos. En SaV, el diseño y desarrollo es totalmente digital, para luego pasar a lo tangible. Se hace un prototipo en impresión 3D para chequear si por ejemplo, una taza tiene la capacidad deseada, si el asa es cómoda.
Luego se hace una segunda impresión en 3D, calculando la contracción. Porque cuando la cerámica colada se hornea, se reduce el tamaño de la pieza hasta un 16%, es por eso que se escala el modelo para hacer el molde adecuado. A partir de este modelo (que se lija, masilla y lija nuevamente), se cuela el molde de yeso.
Un molde sirve para unas 30 ó 40 coladas, ya que se va degradando con el uso. Según la pieza y la complejidad, cuando más taceles (o partes) posee un molde, más rápido se va degradando el yeso. Una vez seco el molde, se cuela la barbotina coloreada, se saca del molde, se retoca y se hornea. Esta pieza llamada «bizcocho» se esmalta, se hornea a +1220°, y sale la pieza final.
Y aunque se quiera calcular todo, con la cerámica siempre hay imponderables. “Hay tantos pasos para llegar a la pieza final que, si tenés que colar y llueve, ese día no se secan las cosas. Entonces, en vez de hacer cuatro coladas de un molde al día, se pueden hacer una o dos, porque los moldes están húmedos, y las piezas tienen que entrar secas al horno. Entonces, se dilata todo. En la cerámica, los tiempos son laxos, por eso hay que tratar de calcular bien el tiempo extra, porque hay piezas que tienen que estar en el momento acordado. Una cafetería no puede abrir sin las tazas”.
+¿Cómo imaginan la evolución de SaV Ceramics?
Siempre tenemos la fantasía de incorporar otros materiales: madera, metal, vidrio; que se puedan combinar con la cerámica, que es el material que dominamos. Sumar otro material, implicaría sacar la producción del taller, y todavía no tenemos afilado el tema de proveedores que trabajen con la calidad que queremos. Pero sólo es cuestión de ponernos a buscar. Incorporar otro material sería un salto para nosotros.+
