La intervención se centra en dos aspectos: cubrir el acceso a la Estación Intermodal de Autobuses y ferrocarriles de Palma de Mallorca mediante una cubierta plana y enfatizar la ubicación de dicha entrada mediante la ubicación de una torre informativa, ya que se encuentra parcialmente escondida entre dos edificaciones existentes.
Las piezas cerámicas se han diseñado y creado expresamente para la cubierta, trabajando conjuntamente con la empresa Cerámica a mano alzada y la fábrica de Cerámica Ferres.
La Estación Intermodal de Palma se construyó en el año 2007, ubicándose en la misma plaza de España donde ya existía la estación ferroviaria. El acceso principal a la Estación Intermodal se producía por unas escaleras que bajaban descubiertas hacia el centro de la estación, con el inconveniente de inundaciones eventuales – debido a su condición de embudo hacia la infraestructura subterránea -, incomodidad para los pasajeros en días de mucho sol o lluvia y las continuas reparaciones de las escaleras mecánicas por estar sufriendo las inclemencias del tiempo.
La intervención se centra en dos aspectos: cubrir el acceso a la Estación Intermodal de Autobuses y ferrocarriles de Palma de Mallorca mediante una cubierta plana y enfatizar la ubicación de dicha entrada mediante la ubicación de una torre informativa, ya que se encuentra parcialmente escondida entre dos edificaciones existentes.
La propuesta realiza una actuación simple mediante la formación de un volumen compuesto por una celosía cerámica, que supone la mínima transformación del entorno a la vez que enfatiza la entrada. Simultáneamente, protege el acceso de la estación de la entrada del agua y supone el mínimo mantenimiento de la misma gracias a su sencilla entidad.
El arranque de la celosía está alineado con una cornisa de los edificios existentes, creando un diálogo formal que complementa la relación cromática y de materialidad entre la nueva cerámica y los antiguos edificios.
La cubierta está rodeada de una celosía armada que “cuelga” de una cubierta plana soportada por dos pórticos de tres pilares HEB-280 cada uno. Dichos pórticos constan de dos vigas paralelas UPN-400 que sujetan una serie de placas alveolares agujereadas por claraboyas, para permitir la iluminación natural del espacio de entrada durante el día. Dicha duplicación de las UPN permite el paso de instalaciones -pluviales y eléctricas- a través de los pilares HEB. Durante la noche la celosía actúa de forma contraria y se convierte en un elemento iluminador, dejando pasar la luz a través de la cerámica, gracias a una serie de luminarias colocadas perimetralmente.
Los faldones de piezas cerámicas descansan en una subestructura metálica formada por tubos de 100×40, modulados según la junta de las piezas cerámicas. El grosor de dichos tubos coincide con el grosor de la junta de mortero más el grueso de pared de la pieza cerámica, de tal manera que no se percibe la existencia de dicha subestructura.
Las piezas cerámicas se han diseñado y creado expresamente para la cubierta, trabajando conjuntamente con la empresa “Cerámica a mano alzada” y la fábrica de Cerámica Ferres. La pieza tiene unas dimensiones de 12x24x12cm y consta de una diagonal que permite colocarse en ambas direcciones, pudiendo crear diferentes patrones, a la vez que impide la colocación de palomas en su núcleo.
La nueva cubierta resuelve el encuentro con el pavimento existente mediante la incorporación de una franja de paneles composite, iguales a los existentes, que se remata con una barandilla de cristal, que recupera la visión de los jardines del parque de las estaciones, ubicados justo detrás del acceso.
Delante de la cubierta, se crea una plaza que está señalada por la torre informativa, que puede verse desde cualquier punto de la Plaza de España. La torre está forrada de composite, al igual que la entrada existente. En la franja que coincide con la celosía de la cubierta también se colocan piezas cerámicas de las mismas características. Una obra de Joan Miquel Seguí.+
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