Apasionado por el mundo del design y las palabras, Marco Sammicheli eligió contar el diseño a través de sus investigaciones, sus charlas, sus artículos para Wallpaper y la curaduría de exposiciones. Y ahora, como Director del Museo del Diseño Italiano en Milán.
Que el Museo del Design Italiano de Triennale es uno de mis lugares preferidos en el mundo, es algo que digo a menudo. Que se ubica en una de mis ciudades amadas, Milán, también. Desde la primera vez que lo visité (creo que en 2008), estoy muy atenta a todo lo que sucede en Triennale. Me recuerdo a mí misma una vez, durante alguna Design Week, transitando exposiciones sala tras sala, hasta que mis pies llegaron a un piso de madera que me pareció familiar: levanté la vista y vi unas clavijas con sogas. Miré más arriba, y me encontré con una parrilla. No había dudas: estaba en el escenario de un teatro. ¡Felicidad absoluta!* Además del Museo del Diseño Italiano, Triennale alberga también el Teatro dell´Arte, con su propia programación.
Hace poco menos de un año, me cruzaba en Internet con la noticia (vía Elle Decor), de que un equipo de “jóvenes de 40 años” comenzaba a rediseñar el futuro de la cultura y el Made in Italy en Milán. Este dream team estaba integrado por Annalisa Rosso**, nueva directora editorial de la plataforma online Salone del Mobile.Milano; Damiano Gullì***, desde hace varios años encargado de la comunicación de Triennale, asumía ahora como Head Curator del Public Program de la institución; y Marco Sammicheli era nombrado Director del Museo del Design Italiano. ¡Guau!
DE LAS PALABRAS A LA ACCIÓN
Marco Sammicheli es el ejemplo de intelectual con un copioso background académico, que ha sabido poner en práctica sus estudios a favor de la investigación y la difusión del diseño y sus protagonistas, revalorizando personajes olvidados, recuperando archivo notable, compartiendo esos saberes con el gran público. Y la dirección del Museo del Diseño italiano le viene “como anillo al dedo”. Su amplia sonrisa que hasta ahora sólo había visto en fotos y videos en la red, ahora está frente a mí, en los jardines de Triennale, donde nos sentamos a compartir una linda charla.
+¿Cómo te iniciaste en el mundo de la curaduría en diseño?
MS Es una historia larga y apasionante, pero la haré breve. Estudiaba Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Siena. Me gustaba mucho el mundo del diseño, pero sabía que lo mío no era diseñar. Como era bueno con las palabras, me dije: ¡Tengo que contarlo! Y así comencé. La Universidad de Siena tenía un acuerdo con la Universidad Bauhaus de Weimar; gané una beca y me fui a estudiar allí la historia de la Bauhaus y del diseño europeo. Una vez de vuelta en Italia, Siena me resultaba demasiado pequeña, así que me mudé a Milán, la capital mundial del diseño, donde comencé un doctorado, y a escribir sobre diseño para diarios. En cierto momento, mis palabras (que eran libros o conferencias en la Universidad) se convirtieron en proyectos, exposiciones, y empecé a colaborar con galerías privadas, y luego con el Museo del Novecento en Piazza Duomo, donde me invitaron a curar una exposición sobre Bruno Munari. Ahí entendí que esta pasión por transformar mi investigación y mi estudio en exposiciones, para dar a conocerlas al público general, era algo que me gustaba hacer.
+¿Cómo llegaste a la Triennale?
MS Fue en 2018, después de haber trabajado como corresponsal en Italia para la revista Wallpaper. En realidad, ya había tenido experiencias de trabajo con Stefano Boeri (Presidente de Triennale) y Paola Antonelli, y me llamaron para coordinar la oficina de relaciones internacionales, para preparar los pabellones de los países participantes en la muestra “Broken Nature: Design Takes on Woman Survival”. Después de la maravillosa experiencia con Paola Antonelli -una profesional que me enseñó mucho sobre esta profesión y en poco tiempo-, Stefano Boeri me pidió que me quedara en Triennale, y me ocupara de otros proyectos, así como de la próxima exposición internacional que será en 2022. Más tarde, sustituí a Joseph Grima como Director del Museo del Diseño Italiano, y comencé a trabajar en este gran proyecto, concentrándome sobre todo en la colección y en la reescritura del montaje del Museo.
EL MUSEO DEL DESIGN ITALIANO RENOVADO
El 8 de julio de 2021, el Museo del Design Italiano presentó un nuevo recorrido expositivo. Situado en la planta baja, y privilegiando la luz natural que ingresa por las ventanas del edificio, las piezas elegidas por Marco Sammicheli abarcan el período 1946-1981, y están entre las más icónicas y representativas del diseño italiano y de la Colección Permanente de Triennale, que reúne 1600 objetos, entre los que se incluyen nuevas incorporaciones como la Nueva Fiat 500 D de Dante Giacosa. Colección que se fue armando en base a las exposiciones internacionales sobre diseño que desde 1936 y cada tres años se muestran en este palazzo que se construyó específicamente para albergarlas.
Los proyectos se cuentan en todo su proceso, con bocetos, prototipos, hasta producción y comunicación. Con el apoyo de la liga por los derechos de las personas con discapacidad Ledha Milano, se organizó un recorrido a través de palabras clave, que arrojan luz sobre conceptos como “proyecto”, “ergonomía”, “producción en serie”, “pieza única”, que favorecen una lectura inclusiva de la muestra.
+Este trabajo se hizo en poquísimo tiempo. Asumiste tu nuevo cargo en diciembre, ¡y la reinauguración del Museo fue en julio!
MS Digamos que fue un trabajo duro, bonito, nada fácil. Pero tengo un equipo de colaboradores de muy alto nivel: Marilia Pederbelli, Damiano Gullì, Giorgio Galleani, Claudio Di Martino, Elvia Redaelli y Tommaso Tofanetti. Son muy buenos y me siento muy protegido por su competencia. Puse mi esfuerzo, mi estudio, mi investigación, mi vida en ello… Y así, el museo es ahora un museo que cuenta la historia del diseño italiano a través de la Triennale. Quería anclar la colección al contexto, y vemos que el público está muy contento.
+¿En qué se diferencia tu visión de la de Joseph Grima, el anterior Director del Museo?
MS Quería mantener la selección de objetos, pero agregar gráficos, diseño expositivo, fotografía y la historia de exposiciones internacionales, para mostrar que estos objetos están aquí por una razón, por una historia; por la voluntad de empresas, curadores, diseñadores, intelectuales. Reescribí todas las didascalias; hice un nuevo catálogo general. Fue una operación en profundidad y puesta en valor de un trabajo que ya habían comenzado los colegas que me habían precedido.
+Y en sólo seis meses …
MS Fue una maratón, pero los italianos somos fuertes en atletismo (risas).
+La colección solía mostrarse en el primer piso. Ahora está en la planta baja, muy cerca de la entrada…
MS Sí, y tengo que admitir que estoy muy apoyado por la visión de Stefano Boeri de hacer que el palazzo esté cada vez más abierto al público, para que sea accesible a todos los grupos de público: no sólo a los profesionales, no sólo a los que estudian o trabajan en el campo del diseño o la arquitectura. Estoy feliz porque hay público todos los días, y como institución pública, llevamos a cabo una función que es hablarle al mundo y educar al público.
+¿Y en qué están trabajando ahora?
MS Hasta el 13 de marzo de 2022 se expone la muestra dedicada a Saul Steinberg, un gran artista, diseñador gráfico e ilustrador rumano que estudió y vivió una parte importante de su vida en Italia, y que se convirtió quizás en el artista neoyorquino por excelencia, autor de portadas memorables para The New Yorker, y finalmente un artista estadounidense naturalizado. Es una gran exposición curada por Italo Lupi y Marco Belpoliti con Francesca Pellicciari. Además, estamos preparando una serie de presentaciones de adquisiciones importantes en la colección del museo, un poco como sucedió con el proyecto Carlo Mollino. Pero principalmente, 2022 será el año de la 23 Exposición Internacional de Triennale, llamada “Unknown unknowns. An introduction to Mysteries”, con curaduría de Ersilia Vaudo y puesta en escena de Francis Kéré, del 20 de mayo al 20 de noviembre de 2022.
UNA COLECCIÓN QUE SIGUE ENRIQUECIÉNDOSE
La Colección permanente del Museo del Design Italiano contiene 1600 piezas que corresponden al período 1946-1981: de la posguerra al grupo Memphis. Es necesario seguir construyéndola: “Tenemos que potenciar la colección para seguir adelante y contar un presente más cercano”, afirma Sammicheli. Un ejemplo interesante es la incorporación de las piezas que Carlo Mollino diseñó para Casa Albonico, y que fueron parte de la muestra “Carlo Mollino. Alussioni Iperformali”, curada por el mismo Marco, que pudo verse hasta mediados de noviembre en Triennale.
+¿Cómo se sumaron las piezas de Mollino a la colección?
MS El caso de Carlo Mollino es extraordinario… Fue un gran maestro del siglo XX, pero que en virtud de algunas de sus pasiones, como la fotografía erótica y el mundo esotérico, siempre fue considerado un poco periférico, un personaje extraño; mientras que era un arquitecto muy hábil, un ingeniero capacitado, y también un gran diseñador. Pero no le gustaba la palabra “diseñador”, y no compartía la idea del diseño industrial. Para él, lo importante era la artesanía, la pieza única, la serie limitada. El mobiliario de la Casa Albonico se sumó a la colección de Triennale, gracias a la ayuda del Ministerio de Cultura. Estamos muy contentos porque la exposición fue gratuita, y el público se interesó mucho por el proyecto, por entender los elementos del lenguaje del diseñador que pueden verse en estos muebles: el cuerpo femenino, el esqueleto de los insectos, el mundo del esquí, el mezclar diferentes estilos arquitectónicos. En particular, ver todas estas cosas juntas en el mobiliario cotidiano usado por una familia hasta hace unos meses es sorprendente, y te devuelve esa magia y habilidad que hicieron grande al diseño italiano.
+Es alucinante ver cómo los vínculos de la mesa se convierten en vértebras, por ejemplo…
MS Realmente lo entendiste. Es por eso que la exposición se llama “Alusiones hiper formales”, porque el cuerpo y la naturaleza no son sólo inspiraciones o datos de partida; son mundos a los que alude constantemente, y hacen que el trabajo de Mollino sea algo único. Ningún otro diseñador italiano mira a la naturaleza y al cuerpo, y traduce estos datos de una manera tan obsesiva, literal, pero a la vez poética y romántica.
+¿Y la colección desde el 81 en adelante?
MS Es mi proyecto de trabajo diario. El año que viene inauguraremos una nueva organización museística: intentaremos ir hasta 1996.
+¿Cuáles son los diseñadores que se incorporan?
MS Pienso en Alberto Meda, Denis Santachiara. Pero también en estudiosos como Enzo Manzini, que con sus teorías y sus investigaciones han abierto el diseño italiano a otros. Y es difícil revelar nombres más contemporáneos. Un museo debe albergar una historia que se haya asentado. Las exposiciones, en cambio, pueden darse el lujo de echar un vistazo a lo contemporáneo, y la exposición que realizará Ersilia Vaudo sólo contará con diseñadores contemporáneos. Mi mundo es un mundo de historia, lo que no significa un mundo de personas que ya no existen, sino un mundo de personas (de mujeres, de hombres), que ciertamente tienen algo que enseñar. Y por lo tanto, asumir la responsabilidad de identificar estos nombres lleva tiempo.
EL DISEÑO EN CASA
Resume el perfil en LinkedIn de Marco Sammicheli: “Profesional de diseño experimentado y curador con un historial demostrable de trabajo en la industria de la investigación y el sector cultural. Fuerte profesional de las artes y el diseño, con habilidades en Diseño de Investigación, Desarrollo de Innovación, Escritura Académica, Dirección de Arte. Con base en Milán”. En la casa de Marco, ¿hay diseño?
+¿Te rodean piezas de diseño en casa?
MS Sí, porque mi mujer es diseñadora, y mis hijas son muy aficionadas al dibujo; ése es el diseño que me rodea. Hay muchos objetos: algunos conocidos, importantes. Pero muchas veces son recuerdos de exposiciones, de proyectos que he realizado. Siempre me gusta tener una pieza de un diseñador con el que he trabajado o del que he expuesto, escrito un libro o dado una conferencia.
+Si tuvieras que elegir un objeto para llevar con vos a todos lados, ¿cuál sería?
MS Quiero decir el nombre de una persona que quiero mucho, y que en este momento quiero recordar: Mario Bellini. No tengo muchos objetos de Mario, pero sí muchos libros, dibujos, notas, porque hicimos juntos una exposición muy importante aquí en Triennale, que luego viajó al Museo de Arquitectura A.V. Šcusev, en Moscú. Entonces, donde quiera que vaya en mi vida, siempre llevaré conmigo mis piezas de Mario Bellini.+
*Soy escenógrafa, y el teatro -del telón hacia adentro- es otra de mis pasiones.
**Imperdible: el trabajo impecable que Annalisa Rosso cumple en la Web del Salone del Mobile y sus redes. Además, escribió un texto curatorial para una de las salas de la muestra «Territorio Híbrido» de Cristián Mohaded en el Museo Nacional de Arte Decorativo.
***También imperdible: Triennale Radio Show, el programa que cada miércoles se emite por Radio Raheem (radio in residence de Triennale), dedicado a profundizar los contenidos y proyectos del Museo, a través de entrevistas a curadores, diseñadores, artistas y performers, con la conducción de Damiano Gullì.