FIMAR Expo y el Salón del Mueble ASOMA dan cuenta de que la relación entre industria y diseño es cada vez más firme en Argentina.
La feria es un formato súper efectivo para mostrarse, para reconocerse integrante de un determinado contexto y por supuesto, para hacer negocios. Los pasillos de FIMAR -la Feria Internacional del Mueble Argentino organizada por la Asociación del Mueble Argentino (ASOMA)– ofrecen desde 2008 un termómetro de la industria actual del mueble, gracias a la participación de empresas de todas las provincias que durante tres días se agrupan para exhibir sus catálogos, lanzar novedades y vender sus colecciones, con la gran posibilidad de encontrarse cara a cara con sus clientes y sus posibles compradores, que pueden probar en vivo y en directo los productos.
La 17º edición de FIMAR tuvo lugar del 27, 28 y 29 de julio en el Forja Centro de Eventos en la ciudad de Córdoba, con la presencia de más de 70 empresas expositoras y la visita de representantes de comercios mayoristas y minoristas, diseñadores de interiores, arquitectos y desarrollistas de todo el país.
Acciones como la entrega de premios a los mejores stands de la feria, o dedicar un espacio al Salón del Mueble ASOMA para exhibir y premiar al diseño argentino a través de los Premios ASOMA, así como lanzar el Corredor del Mueble, benefician enormemente a la industria, y son la base para seguir creciendo.
EL CORREDOR DEL MUEBLE: UN CASO DE COOPETENCIA
Durante la ceremonia de apertura de FIMAR se realizó el lanzamiento del Corredor del Mueble, un proyecto en el que ASOMA viene trabajando desde hace un tiempo, con el objetivo de mejorar y optimizar la distribución de muebles en el país.
Según nos explicó Gabriel Campins, representante de la Cámara de la industria de la Madera, el Mueble y Afines (CEMA), “Junto a Diego Travaglino -especialista en sistemas de logística-, diseñamos un corredor que abarca Buenos Aires, Rosario, Córdoba y Mendoza, y contratamos dos empresas de transporte. SET Logística se encarga de depósitos y del transporte en el corredor Buenos Aires-Rosario-Córdoba; y Andesmar de Mendoza a Córdoba. Vamos a buscar desde Rosario o desde Córdoba llegar al NEA, y desde Córdoba y Mendoza al NOA. El gran desafío para más adelante será llegar al Sur”.
+¿Cómo funciona el Corredor del Mueble?
Si una empresa de Mendoza quiere entregar en Buenos Aires y nos elige mediante un centro de contratación de los servicios virtual, hace el trayecto Mendoza-Córdoba, y ahí lo carga en los circuitos que tiene SET o queda depositado para su posterior entrega. Lo que buscamos es que haya, además de un mejoramiento sustancial del servicio, una baja de tarifas, y que todas las partes salgan beneficiadas, de acuerdo a las leyes de la coopetencia. Además, recibimos la noticia de parte de Pablo Bercovich (Director Nacional de Política PyME de la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo) que nos han otorgado un Aporte No Reembolsable (ANR) para financiar este proyecto y el de Trazabilidad, que consiste en ofrecer al público comprador la trazabilidad del mueble que compra.
EL DISEÑO APLICADO ESTRATÉGICAMENTE
Elegimos a tres expositores de FIMAR, que son fabricantes de muebles, entienden al diseño como herramienta estratégica y suelen contratar servicios de diseño, tanto para el desarrollo de productos como para proyectar sus stands y su comunicación, porque comprobaron que estas inversiones se traducen en dividendos, y su gran experiencia en producción se ve enormemente potenciada.
Muebcol posee su fábrica en la localidad de Colazo, a 130 Km de Córdoba Capital. Su representante, Gonzalo Craver, nos contó que su padre fundó la empresa hace 58 años para fabricar placares. Con el tiempo fueron agregando mesas, sillas y camas, y mutando de la madera maciza de algarrobo al roble y al cedro, hasta llegar al pino. Actualmente, están trabajando en mezclas de pino y MDF, y empleando una tecnología nueva. “Le compré las matrices a una fábrica de ataúdes, y las adaptamos para llevarla al mueble”.
Para esto, contrató a Elisabet Arn y Daniel Salum del estudio Arn-Salum, que luego de investigar las potencialidades de esta tecnología que permite realizar piezas de multilaminado curvado, trabajaron en una serie de productos pequeños y desarmables. Así surgió la colección Sentidos, de mesas auxiliares y bancos que se lanzó en FIMAR. “El banquito o mesa de arrime para sofá o la cama se arma muy fácil (viene con las dos guías donde posicionar las patas y poner un tornillito en el medio), y se enviará desarmado en una caja muy chica para facilitarle la venta online a los muebleros, ya que nosotros no vendemos al público”.
“Nuestra idea era traer estos productos para testear su aceptación y ver qué modificaciones posiblemente tendríamos que hacer. ¡Y les gustó a todos! El balance de la feria es muy positivo. Buscábamos que los clientes que ya tenemos vean la mercadería, y poder hacer contactos nuevos. Vino mucha gente del Sur donde no tenemos corredores, lo que nos permite abrir nuevos mercados”, concluye Gonzalo.
Para Diego Genoud de Pergamino Muebles, “El diseño es la base en la competitividad. Y en la distinción del producto, el diseño es la clave. A través del diseño, podés llegar a distintos puntos de venta que de otra manera sería imposible. No sólo el diseño define la funcionalidad del mueble, sino que le da herramientas de venta a nuestro cliente”.
Un caso concreto es el de la silla Kurbë diseñada por Jonny Gallardo, y seleccionada en el Salón del Mueble ASOMA. Posee un diseño envolvente, y una mezcla de multilaminado con madera de eucalyptus grandis en distintos acabados. Pero a su vez, tiene herramientas de venta muy potentes, como el hecho de que el asiento puede despegarse de la estructura.
“Fabricar el asiento es algo relativamente sencillo para nosotros, y el tiempo de entrega es rápido. Si el cliente compró la silla y quiere cambiar el asiento (porque el tapizado se le manchó, o simplemente quiere cambiarlo), lo pide a la fábrica, y en diez días tiene el producto como le gusta. Es una silla de la que estamos muy orgullosos, y se vendió muy bien en la feria”.
Luis Campagnola fundó su fábrica de muebles de algarrobo hace 35 años en Sáenz Peña, Chaco, y volvió a FIMAR luego de algunos años de ausencia, con un amplio stand diseñado por Marcelo Chiabrando para exhibir un portfolio totalmente renovado, ya que decidió cambiar de madera: ahora trabaja con eucalipto, respetando los parámetros del viejo carpintero: caja y espiga, cola, buen cepillado, lijado y lustre. Mantiene un tipo de diseño escandinavo y liviano, que no es pesado a la vista.
“Esta madera es difícil de trabajar, pero tenemos la ventaja de tener un buen maquinado y herramientas de corte. Compramos la tabla ancha y la cortamos en tiritas. Le agregamos mucho trabajo, pero tenemos la seguridad de que con el tiempo, no va a hacer ninguna panza. Una tapa de mesa tiene unas treinta tablitas. Nuestro ensamble no es a canto vivo (tabla con tabla), sino que tiene unos dientecitos, lleva cola fría, y va a una prensa dos horas hasta que fragua el material”. Simplemente impecable, el tablero de la mesa parece una madera entera; y al tacto, vidrio.
+¿Cómo les fue en FIMAR?
¡Nos fue excelente! No vine con la idea de vender sino de mostrar, pero me sorprendió el volumen de venta y la aceptación del producto. La gente viene y se sienta, elogia el tapizado, la inclinación de las patas, las curvas, toca las mesas; le explicás cómo es el embalaje. Esto es lo más directo que podés estar con el comerciante.
EL SALÓN DEL MUEBLE ARGENTINO
Este año, FIMAR fue sede del Salón del Mueble Argentino que organiza ASOMA, invitando a diseñadores independientes, estudios de diseño, fabricantes de muebles y estudiantes a presentar sus diseños propios, innovadores y originales. Más de treinta productos fueron preseleccionados y expuestos durante la feria.
Teniendo en cuenta criterios de ergonomía, calidad, novedad, sustentabilidad y aporte a la tipología, el jurado eligió ocho piezas, que pasaron a la fase final para competir por los Premios ASOMA: la colección Kaylla de Leonardo Puppo para Mestizo Diseño, el banco F de Leonardo Zingaretti y Germán González Holc, la mesa baja Nonina de Franco Zannier para Proa Negra, la silla Kurbë de Jonny Gallardo para Pergamino Muebles, el banco Mike de Juan Serrano para Michael Thonet, las mesas Florian de Casa Capital Muebles, la línea Grill de Federico Guzmán Hosig para Tromba Estudio, y la silla y banqueta Yizi de Esteban Labarthe para Tienda Inventario.+
Colección Kaylla de Leonardo Puppo para Mestizo Diseño 
Banco F de Leonardo Zingaretti y Germán González Holc 
Mesa baja Nonina de Franco Zannier para Proa Negra 
Silla Kurbë de Jonny Gallardo para Pergamino Muebles 
Banco Mike de Juan Serrano para Michael Thonet 
Mesas Florian de Casa Capital Muebles 
Línea Grill de Federico Guzmán Hosig para Tromba Estudio 
Silla y banqueta Yizi de Esteban Labarthe para Tienda Inventario 
Los diseñadores que pasan a la final para competir por el Premio ASOMA 
Vajillero de Darío Marenchino y sillas Línea Juliana de Arn-Salum 
Cucheta y mesa baja de Arn-Salum y línea Grill de Tromba Estudio 
Silla Delta de María Emilia Velardez 
Mesa de centro Nebraska de María Soledad Pons 
Silla Orangután de Werfil Davicino 
Línea de muebles plegables Maja de Oblumo 
Camas para mascotas de Reversible Estudio 
Banco Matero de Vicente Mazzitellij 
Línea de muebles tipo RTA Metalwood de Popi Bilesio 
Silla Iberá de Damián Panussi 
Silla Ojo diseñada por Franco Barsante para Bordigoni 
Silla Chita de Julieta Soledad Alvarez 
Banco Qunuña de David Apaza Yanarico 
Colección Orillos de Luciana González Franco para Arredo 
M-1 de Emiliano D’Andrea 
Estantería Cactus de Iván Grión 
Silla Tiyakuy de Jonny Gallardo para Serrano 
Wooden chair de Karen Achaval 
Biblioteca modular CAO por Marcos Flores 
Colección Malicha by Cuqui
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