Las joyas Fruto del diseño de Constanza Nolé

La joyería de Constanza Nolé es un Fruto; así como el fruto es la joya de las plantas. Un diálogo con la diseñadora cordobesa, cuyas piezas surgen de la maduración de ideas y procesos de investigación.

Si bien me había cruzado con los accesorios de Fruto en las redes, me interesé por la marca cuando supe que su creadora, la diseñadora Constanza Nolé, sería parte de uno de los tres paneles de diseño local moderado por Coti Cubas en el Congreso de Diseño de la III Bienal Córdoba Ciudad Diseño que sucedió en el mes de octubre. Allí contó los orígenes de Fruto y habló del significado de sus creaciones, a veces más etéreas, a veces más sólidas.

DE LAS CIENCIAS ECONÓMICAS A LAS DE LA JOYA

Siendo estudiante de cuarto año de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba, Constanza Nolé decidió hacer un cambio radical de carrera, y atender a su vocación por el diseño y el arte que la acompañaba desde siempre. Es así que se recibió de Licenciada en Diseño Industrial en la Universidad Siglo 21. Y el paso por un taller de joyería contemporánea terminaría por delinear su camino.

+¿Cómo fue tu acercamiento a la joyería contemporánea?
Allá por el 2001 (mientras estudiaba Ciencias Económicas y tenía un bebé de dos años), comencé a armar accesorios, actividad que me resultó muy placentera, y empecé a comercializar. Luego cambié de carrera, y mientras estudiaba Diseño Industrial experimenté con resinas, con el objetivo de generar mis propias piezas. Tiempo después, una compañera me contó que estaba tomando clases de joyería contemporánea acá en Córdoba, en el taller de Cecilia Richard, y sin dudarlo, allá fui. Sabía que ése era el camino que quería recorrer…

+¿Cómo surgió la marca Fruto?
Cuando comencé mi segundo año en el taller de Cecilia Richard, en el 2013, se abrió la convocatoria para el Salón Diario La Capital en Rosario, espacio en el que mi maestra y referente había sido seleccionada y premiada. En el afán de seguir sus pasos me presenté con las primeras piezas de Emerger, y fui parte de la muestra. En ese momento me di a la tarea de hacer crecer la serie, y buscar la viabilidad productiva y comercial. En 2016 hice el registro de marca, pero recién en 2018, gracias a la propuesta de Cecilia de hacer una muestra en su espacio junto a Rocío Moreno, es que terminé de resolver detalles constructivos y el packaging. Supuesto Fruto fue una muestra hermosa que considero el comienzo de este camino.

+¿Por qué el nombre “Fruto”?
Cada serie, cada pieza deviene casi orgánicamente como resultado de la maduración de un proceso de exploración y transformación interno -como sucede analógicamente en la naturaleza-, para luego alimentar una experiencia en el usuario, y seguir sembrando la semilla de la joyería contemporánea. Y también, porque el fruto es la joya que pende de la planta.

EMERGER Y SUMERGIR

“En Fruto se crea joyería contemporánea con mente, manos y corazón. Cada pieza está realizada artesanalmente; es fruto de la convicción y la pasión con que se concibe”. Cómo elevar el plano a la tridimensionalidad fue la preocupación de la primera línea, Emerger, que a través de acciones de calado y desplegado, hace surgir estructuras complejas que se transforman en aros, anillos, broches, collares y pulseras. El metal elegido es el bronce, mientras que el color lo aporta el esmalte.

La colección Sumergir incluye sólo broches, que pueden venir en dúo. Son piedras de resina que recuerdan a minerales y piedras preciosas, y conectan con la infancia de Constanza, acercándola poéticamente a su padre geólogo.

+¿Cuál fue la búsqueda en ambas series?
En Emerger, la búsqueda estética es morfológica, el desplegado genera volúmenes etéreos y delicados, donde el protagonismo se lo disputan entre la pieza y la proyección de su sombra. La pieza transmite el mismo movimiento que la generó. En Sumergir, la búsqueda es más poética; difícilmente las piezas se pueden replicar, tienen un argumento más íntimo, que me conecta con el pasado. El proceso comienza con la construcción interior, tejidos que luego fosilizo en resina, generando cuerpos que aparentan ser un mineral, y que luego engarzo en metal. En Argentina vendo muchos broches -lo que es inusual-, pero me encanta, porque es la pieza que porta la esencia de la serie, y el sistema de sujeción queda oculto, a diferencia de los collares, por ejemplo.

+¿Quién es el usuario de Fruto?
Son en su mayoría mujeres entre 30 y 75 años, que tienen formación o afinidad por carreras creativas, con personalidad abierta y afectada por el sentimiento, afirmativas, despreocupadas, atrevidas, imaginativas, seguras de sí mismas, experimentadoras, relajadas, rebeldes y empoderadas. Estas joyas son objetos de deseo que no cumplen con una necesidad primaria sino emocional; de autorrealización o provocación. Como todo el arte contemporáneo, tiene un vínculo estrecho con expresiones artísticas de la infancia; de esos primeros impulsos… Y entonces, se me ocurre que se asemejan a un juguete que como adultos necesitamos, para mantener vivo el recuerdo.

+¿Qué importancia le das a contar la marca y sus productos?
Le doy la misma importancia que a la producción de la pieza en sí misma. Trato de construir el universo de Fruto en su totalidad, donde cada imagen, cada caja y cada tarjeta aporte una cuota extra en nivel de detalle y experiencia con el usuario.

Con Constanza Nolé en el Congreso de Diseño de Córdoba
UN DISEÑO QUE DA FRUTOS

2022 fue un año en el que Fruto participó activamente de varios proyectos en el exterior, como Earrings Galore 2022-2023, una muestra itinerante en EE.UU. que selecciona aros de todo el mundo, e hizo su debut en la semana de la Joyería Contemporánea en Nueva York, además de integrar la muestra “Black & White in Color” en Palm Beach Design Showroom, en Florida. También fue parte de Collectiva Meeting, una muestra internacional en Oporto, Portugal.

Localmente, las producciones de Fruto ya han sido expuestas en el Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino, el Museo de las Mujeres y el Museo de Arte Popular José Hernández; y fueron seleccionadas por MICA Sector Diseño, la Bienal Internacional Córdoba Ciudad de Diseño, el Fondo Nacional de las Artes e Innovar.

En lo personal, me gusta la joyería que -independientemente de sus formas y materiales- acompaña la vestimenta con pequeños acentos, sin traspasar los límites del accesorio; que se haga notar, pero sin ser protagonista. Para mí, las piezas de Fruto entran en esta categoría: embellecen y acompañan. Sin perder independencia ni identidad, complementan. Son lo que llamo “buen diseño”. ¡Bravo Constanza!

DÓNDE CONSEGUIR FRUTO

En la tienda online de Fruto www.fruto.com.ar
En la trastienda Supuesto www.supuesto.com.ar
En Tienda Malba
En Iris Trends Gallery y en Earrings Galore, de Heidi Lowe Gallery +