3 horas en las oficinas y el archivo de PUMA en Herzo

Innovación continua para diseñar el futuro de la indumentaria deportiva y hacer atletas más rápidos: Forever Faster. Una visita guiada por las oficinas centrales de PUMA en Herzogenaurach, y la posibilidad de entrar al archivo y conocer a Mr. PUMA. En tres horas.

Un enorme edificio rectangular en medio de un paisaje bastante inhóspito -en una mañana neblinosa y fría de febrero- fue mi primera visión de las oficinas centrales de PUMA en Herzogenaurach, Alemania. A medida que me acercaba, fui descubriendo un complejo arquitectónico muy orgánico en su recorrido; lo que tal vez suceda porque, a pesar de haber sido construido en dos etapas, fue enteramente diseñado por el mismo estudio de arquitectura: Klaus Krex.

PUMAVision Headquarters se llamó la primera construcción de 2011, inspirada en la famosa caja de zapatos roja característica de la marca y su logotipo. Fueron tres edificios: uno es ocupado por las oficinas (Brand Center); el segundo (SOHO) incluye un salón de usos múltiples (según se lo equipe, para ser usado en eventos, conferencias, etc.), una sala multimedia y numerosas salas de conferencias.

El tercer edificio de fachada roja (THE BOX), está revestido con Alucobond, un panel composite formado por dos láminas de aluminio y un núcleo ignífugo relleno de minerales, energéticamente eficiente. Allí se ubican una tienda comercial, un outlet y un restaurante.

Se tuvo en cuenta el uso eficiente de la energía, generada exclusivamente a partir de fuentes renovables, y una interacción óptima de los sistemas de calefacción, ventilación, aire acondicionado, iluminación y sombreado, gracias a un moderno control de temperatura central de hormigón, y el sistema fotovoltaico en el techo del edificio comercial. 

La ampliación de 2016 contempló un nuevo edificio administrativo (NOHO) de 123 metros de largo y 22 de alto, para albergar 14 mil m² de oficinas y un poco más de 500 empleados, construido frente a la sede central de PUMAVision. Allí funcionan los distintos equipos: el creativo (diseño, innovación, marketing, merchandising, desarrollo de producto y product management), el de conducción (business solutions, e-commerce, finanzas, recursos humanos, IT, legales, logística, ventas y sourcing) y retail store.

Las oficinas son muy luminosas, gracias a su frente con ventanales de piso a techo, y cuentan con numerosas cabinas insonorizadas para mantener reuniones o conversaciones privadas. No faltan las cafeterías con metegol incluido, un gimnasio, y un área exterior con canchas de fútbol, vóley y básquet, además de un área multifuncional de 500 m²; siempre para uso de los empleados. 

El ofrecer espacios de trabajo flexibles y atractivos es clave para PUMA, que acaba de ser nombrada Top Employer por sexto año consecutivo. Según números oficiales, actualmente en Herzo HQ trabajan 1830 empleados, 52.5% mujeres y 47.5 % hombres, de 86 nacionalidades. ¡Hasta tienen su propia revista online: PUMA Catch Up! Esa atmósfera positiva se respira en cada uno de los rincones que visité junto con Anton Sarychev, mi guía perfecta durante mi estancia en PUMA. 

EL PUMA BRIDGE (O LA LÍNEA DE TIEMPO DE PUMA)

Como elemento de conexión entre la sede central existente y el nuevo edificio, nació el PUMA Bridge, un puente de 85 metros de largo y 173 toneladas de acero que atraviesa la avenida Hans-Ort-Ring. Y que es la sede permanente de una muestra que transita los 75 años de PUMA. Acá, Anton me dejó en manos de Ulrich Planer, diseñador gráfico y encargado del Puma Archive, un proyecto que nació de la voluntad de Mr. PUMA, Helmut Fischer, a quien tendría la enorme fortuna de conocer ese día, y hasta me dedicaría su libro.

A partir de la miniserie alemana Die Dasslers (Rivales por siempre, en su traducción al español, y que puede verse por Flow) ganó popularidad la historia de los Rudolf y Adolf Dassler, los hermanos que fundaron en 1922 una fábrica de calzado deportivo en Herzogenaurach, y que se separaron en 1948 para continuar con sus propias compañías, PUMA y adidas respectivamente, lo que significó un nuevo comienzo para ambos.

Para Rudolf, una nueva fábrica y una nueva empresa: primero fue Ruda, y rápidamente, PUMA, porque desarrollaría calzado tan innovador, que haría que los atletas adquirieran la rapidez y ligereza del felino. “Nuestro mantra Forever Faster (Siempre más rápido) nos impulsa a seguir a la vanguardia. El futuro del diseño de ropa deportiva es nuestro: exploramos sin descanso, predecimos constantemente e influenciamos, aportando nuevas innovaciones a los atletas”, aseguran desde el departamento de diseño de PUMA.

Algunos datos que nos dio Ulrich mientras transitamos el PUMA Bridge: en la primera foto, dos modelos de la época en la que los hermanos aún trabajaban juntos en la Gebrüder Dassler Schuhfabrik (Dassler Brothers Shoe Factory): botín de fútbol para el jugador Baptist Reinmann (1927) y Sprint Spike, calzado para velocistas (1928). ¿Sabías que para promocionar su show Moonwalker de 1989, Michael Jackson tuvo sus propias PUMA con el formstrip plateado?

Y las PUMA RS-Computer fueron las primeras zapatillas inteligentes. En 1984, Armin Dassler (el hijo mayor de Rudolf, que había tomado la dirección de la empresa luego de la muerte de su padre) tuvo la idea de ayudar a los atletas a rendir mejor, utilizando las nuevas tecnologías disponibles de escaneo y detección. ¡Innovación absoluta! En 1985, PUMA desarrolló un nuevo sistema de amortiguación: la colección Running System (hoy RS), con entresuela Multiplex IV, una suela que combinaba cuatro componentes con diferentes características físicas y químicas en una sola unidad. Esta zapatilla absorbía los impactos y controlaba el movimiento.

Sobre la base del nuevo sistema, se desarrolló junto con la Universidad de Erlangen una de las mayores innovaciones de PUMA, la zapatilla RS-Computer, la primera con computadora (ubicada en el talón del RS), capaz de traducir los datos, para que los atletas pudiera hacer comparaciones y plantearse objetivos para ser más competitivos.

Las PUMA Suede son un modelo más que icónico. Originalmente llamadas PUMA Crack, el atleta afroamericano Tommie Smith las llevaba puestas cuando, luego de ganar la medalla de oro en los 200 metros de los Juegos Olímpicos de México en 1968, subió al podio de la victoria junto a John Carlos (que ganó la de bronce), y mientras sonaba el himno nacional estadounidense, hicieron el saludo del Poder Negro frente al público, alzando su puño envuelto en un guante negro.

El calzado evolucionó hasta convertirse en Clyde (por Walt “Clyde” Frazier, el jugador de basket, para quien se le diseñaron colores especiales), para finalmente adoptar el nombre de Suede. Hoy es un modelo muy utilizado en prácticas de skate y como calzado urbano.

Otra de las cosas que aprendí de transitar el PUMA Bridge y el Archivo de PUMA, es que el Formstrip, la forma que recorre las zapatillas PUMA en los laterales, tiene una función estructural en el zapato, estabiliza el pie y le da rigidez y forma en su justa medida, sin comprometer su liviandad. Creado en 1958, es un segundo logotipo de PUMA, un elemento de diseño que también se utiliza en la indumentaria, que reforzó la identidad visual de la marca.

MR.PUMA Y EL ARCHIVO

¡Y llegó el momento de conocer a Helmut Fischer (aka Mr. PUMA)! Nació en Herzogenaurach, en 1949, un año después de la fundación de PUMA en 1948. Era vecino de Armin Dassler y soñaba con algún día trabajar en PUMA; sueño que pudo concretar.

Al terminar sus estudios en publicidad, ayudó a fundar el departamento de marketing de la compañía, y hoy es Asesor Senior de Marketing, con 47 años en el equipo. Coleccionista de la marca, fue quien propuso la creación de un archivo de PUMA, y quien tuvo a su cargo la tarea de organizarlo.

Para conocer la historia de la marca, es más que útil chequear el PUMA Timeline online.

Para proteger el legado de PUMA y de los grandes atletas, tanto el calzado como las prendas, gráfica y demás accesorios, cada pieza se escanea digitalmente en 3D. Esa base de datos sirve como inspiración y fuente de consulta para diseñadores e historiadores. A su vez, las piezas suelen prestarse para exposiciones en todo el mundo.

En el archivo descubrí un pequeño buzo celeste que perteneció a uno de los mejores jugadores de fútbol argentino, Mario Kempes (con su nombre grabado), y una revista sobre el Mundial de Fútbol 78. ¡Gracias Ulrich por dejarme entrar en el tesoro de PUMA! Y por supuesto, al equipo de PR de PUMA Argentina, que se encargó de gestionar esta posibilidad única.

LAS HUELLAS HISTÓRICAS DE PUMA

Para finalizar mi tour por el PUMA Headquarters, Anton me invitó a ver las huellas de los grandes deportistas de la marca (calzando sus PUMA, claro). En el patio de entrada, cual Hollywood Walk of Fame, me encuentro con las pisadas del hombre más veloz del mundo Usain Bolt, las del gran Pelé, las del siete veces ganador del Campeonato Mundial de Fórmula 1 Michael Schumacher, las de Walt Clyde y Tommie Smith, así como las de nuestro Diego Maradona.

En el libro que Mister PUMA me regaló y dedicó a mano, hay una foto del Diego autografiada, de 1986, que dice: «Yo soy un PUMA».+