Un nuevo pabellón parte de la red Maggie’s, ubicado en el recinto de Domènech i Montaner: la arquitectura para el bienestar por Benedetta Tagliabue – Miralles Tagliabue EMBT Arquitectos.
*El centro Kálida Sant Pau abre sus puertas con un diseño sensible al lado del hospital pensado para acoger y acompañar emocionalmente, mejorando la calidad de vida de las personas con cáncer.
*El pabellón diseñado por Benedetta Tagliabue – Miralles Tagliabue EMBT Arquitectos se integra en el jardín del hospital y da continuidad al entorno modernista de Domènech i Montaner.
*Es el primer edificio impulsado por la Fundación Kálida y el primero apadrinado por la red Maggies’ Centres en Europa. La red Maggie’s en Reino Unido, es conocida por construir centros de calidad al lado de hospitales: Foster, Rogers, Zaha Hadid, OMA y entre otros, firman sus pabellones.
*Acompaña al proyecto el diseño interior de Patricia Urquiola Studio, haciendo un tándem de dos mujeres.
*Un edificio de pequeñas dimensiones, pero grande en su finalidad de proveer una arquitectura que cura.
El 9 de mayo se inauguró el centro Kálida Sant Pau diseñado por Benedetta Tagliabue – EMBT. El pabellón pertenece a la red Maggie’s Centres, fundación dedicada a la promoción de espacios para la atención de personas con cáncer. Se trata de un edificio único y pionero en España que cuenta con 400 m² y un jardín, dentro del recinto del Hospital de Sant Pau,declarado Patrimonio de la Humanidad en 1997.
El proyecto del estudio barcelonés desarrolla la capacidad curativa de la arquitectura para ayudar a las comunidades y generar espacios de convivencia donde compartir emociones y experiencias. Su objetivo principal es mejorar la calidad de vida de las personas que sufren laenfermedad y también de aquéllas que las acompañan. La arquitecta Benedetta Tagliabue ha podido volcar en el diseño del edificio su propia experiencia, tras haber vivido en primera persona el proceso tumoral de Enric Miralles.
El edificio consta de dos plantas y una extensa zona ajardinada. La planta baja se plantea como un espacio flexible y abierto, parte del jardín que lo rodea. El espacio se organiza en torno al vestíbulo y a un comedor de doble altura. El programa incluye una pequeña biblioteca y una sala de usos múltiples entre otros espacios. El interiorismo ha sido desarrollado por Patricia Urquiola.
En el Centro Kálida Sant Pau se desarrolla un programa asistencial que complementa los tratamientos médicos que tienen lugar en el hospital, por lo que el pabellón tiene un fácil acceso desde el departamento de oncología del mismo. La escala del edificio, el tratamiento de las fachadas y diseño del jardín permiten proponer un diálogo respetuoso con el entorno excepcional en el que se ubica: el recinto modernista del Hospital de Sant Pau de Barcelona. El Centro Kálida da continuidad a la idea original de la arquitectura de Lluís Domènech i Montaner: crear espacios innovadores y dotarlos de una belleza singular.
La Fundació Nous Cims y la Fundació Privada Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, con lacolaboración de la Fundacióde Gestió Sanitària de l’Hospital de la Santa Creu i Sant Pau son losimpulsores de este centro. El edificio forma parte de la red global de centros Maggie’s, quecuenta con una extensa lista de obras de arquitectos de renombre como Steven Holl y NormanFoster.
DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO
El centro Kálida es un espacio de apoyo emocional, social y práctico para las personas con cáncer,sus familiares y amigos. Es una casa abierta a todos con profesionales cualificados para ofrecer su ayuda, una casa para conocer a otra gente, una casa donde encontrar un rincón tranquilo o tomar una taza de té.
La parcela está situada entre el nuevo hospital y el hospital modernista original. Es paralela a la nueva vía definida por el plan especial urbanístico y sigue la orientación ortogonal del recinto modernista.
El proyecto incluye un pequeño edificio de 400 m² y una zona de jardín dentro de la zona verde del proyecto general del recinto. El centro está diseñado a modo de pabellón ajardinado donde los límites entre interior y exterior se desdibujan y varían. Es un edificio que busca el confort del usuario ofreciéndole intimidad, luz, recogimiento y protección adentro del jardín.
El edificio se organiza en dos niveles de 200 m² (aprox.) cada uno dentro de las alineaciones y edificabilidad definidos en el plan especial urbanístico. El acceso principal se produce a través de la planta jardín (bajo rasante según la cota de referencia) con acceso directo a la zona de oncología del nuevo hospital a través de una zona pavimentada. Esta zona también permite el acceso de vehículos de bomberos en casos de emergencia. El jardín está protegido por una serie de muros, pérgolas y vegetación que permiten desarrollar las diferentes actividades del centro.
La planta inferior es un espacio abierto y flexible pensado como jardín o secuencia de jardines y patios variados donde se encuentra la cocina, el comedor, una pequeña biblioteca y una sala polivalente que permite llevar a cabo diferentes actividades de apoyo para los usuarios. Cada pieza está rodeada de verde. Los límites de los patios,jardines, pérgolas y árboles propuestos,controlan las vistas desde cualquier punto para intentar hacer desaparecer el entorno hospitalario y al mismo tiempo permitir el uso de las zonas exteriores sin sentirse observado desde los edificios altos que rodean la parcela.
La planta superior (planta baja según la cota de referencia) se encuentra al nivel del nuevo paseo definido por el plan urbanístico. En la zona de entrada de la planta inferior se encuentra el vestíbulo;un paseo por el jardín acompaña hasta el patio de entrada.El nivel superior se organiza alrededor del doble espacio central del comedor. El edificio acentúa su transparencia en el lado sur, hacia los edificios modernistas, con un filtro de persianas de madera y celosías cerámicas para mantener la intimidad.
La fachada del edificio es un muro de ladrillo cerámico de color, textura y composición variada combinado con piezas cerámicas de colores y geometrías diferentes que transforman este muro en un elemento más del jardín. El muro se transforma en una celosía cerámica que permite filtrar la luz, controlar las vistas, ventilar y al mismo tiempo seguir preservando la intimidad de las personas del centro. En la fachada sur y hacia el recinto modernista se sitúan las ventanas protegidas también con persianas de madera y elementos cerámicos.
Según la idea fundamental del proyecto, el nuevo edificio crece como nuevas flores de colores en el jardín del hospital original.El proyecto se inspira en la riqueza de los materiales, texturas,colores, geometrías y vegetación del hospital modernista. El diseño interpreta el lenguaje original de la arquitectura de Domènech i Montaner reflejado en el nuevo jardín, en las fachadas y la cubierta.+
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